viernes, 18 de marzo de 2011

Latinoamerica y los hijos de pedro Páramo



Es importante acercarnos a los acontecimientos que se estaban presentando en la época en la que Juan Rulfo escribe Pedro Páramo, inicialmente nos encontramos con la revolución mexicana y junto a ella los rebeldes y cristeros. Al inicio del siglo veinte, mas exactamente en la primera década de este México atraviesa su revolución la cual es impulsada por terratenientes en este caso uno de tantos Madera pero que se mantenía viva gracias a la situación de la clase media y pobre, un ejemplo claro lo podemos ver en la novela cuando Pedro Páramo financia las revoluciones que encuentre solo por el hecho de mantenerse y también obtener mas poder. Años mas adelante nos encontraremos a los cristeros que de una u otra forma son reductos de esa revolución mexicana y que tomara forma gracias a dos elementos el primero a la misma idea que venia desde inicios de siglo y segunda la unión de la iglesia en la revolución la cual se estará levantando contra el gobierno y su política en contra de la iglesia y el intento de introducir el pensamiento laico en una tierra profundamente creyente, elementos de estos los podemos también encontrar con Domingo Faustino Sarmiento y otros quienes ven con interés el establecimiento de gobiernos laicos con un propósito civilizatorio.

La tierra y la mujer pasan a ser posesión de quien tenga el poder para eso, las dos dan frutos y son disputadas mientras sean bellas, ya áridas pierden su interés. Nos topamos con la situación de la mujer en la época quien sería tratada como objeto y su importancia radica solo en su cuerpo y en la posibilidad de engendrar.
“todos somos hijos de Pedro Páramo” podría llegar a ser evidencia de cómo no solo en un lugar sino en todo ese México de la época ocurre lo mismo los señores son dueños de las tierras y de lo que habita en ellas y aun mas todos son hijos de México y como en Comala estaban sucediendo cosas.  

Es curioso como en la literatura en repetidas ocasiones se presenta la telemaquia y en Pedro Páramo a mi parecer ocurre lo mismo, Juan Preciado va en busca de su padre y termina en un dilema consigo mismo. Es aquí donde encontramos relaciones con el mito, primero Juan Preciado y su telemaquia, segundo vemos como Bartolomé San Juan y Susana San Juan terminan en una relación incestuosa como los personajes míticos Edipo y su madre, Isis y Osiris. El mito viene una y otra vez implícito en la literatura de la antigüedad hasta nuestros días.

La muerte es un elemento en la obra de Juan Rulfo, elemento de culto para México y sus habitantes, la cultura y sus modismos están presentes describiéndonos las características sociales y comportamientos de los individuos tanto hombres como mujeres.
La celebración del día de los muertos mexicana en Pedro Páramo interrumpiría a estos espectros con voces murmurantes que cuentan sus historias, una y otra vez repiten la historia de Comala, sus desgracias, sus tristezas, las ilusiones perdidas.

En un lugar lleno de sed creada por sus instintos más humanos y cuando se pierde toda fe y esperanza sus pobladores terminan secándose desde el interior hasta al fin poco a poco desvanecerse como la arena que el puño de una mano suelta en el viento. Juan Preciado lo vio justo cuando llegó a Comala, pues una espesa niebla acompañada de arena cubrió el camino.
Es posible que Juan Rulfo quisiera hablar de lo que ocurría en México en la época, tal ves los intereses creados estaban sobrepasando lo humano y esa ambición de algunos estaba llevando al deterioro de los valores morales tanto así que la vida no valía nada y solo la muerte misma seria la única compañera y confidente monótona  que se alimenta del mismo hastío. En Pedro Páramo no hay esperanza, solo es una insinuación de esta  que lo único que hace es mantener hasta el fin de cada hombre con un interés particular pero que no será el fin ultimo, pues no hay fin solo resignación.